El Canal de Panamá reveló recientemente que sus ingresos alcanzaron los $4.986 millones en el año fiscal 2024, que va de octubre de 2023 a septiembre de 2024. Esta cantidad representa un aumento del 1% con respecto al año anterior, lo que equivale a un aumento de aproximadamente $18 millones. , a pesar de la severa sequía que ha enfrentado la vía interoceánica.
El administrador del Canal, Ricaurte Vásquez, señaló que después de tres o cuatro años de sequía prolongada, hemos aprendido lecciones valiosas sobre cómo afrontar estas situaciones. A pesar de las condiciones desfavorables, los ingresos superaron las expectativas y superaron el objetivo en 209 millones de dólares.
La sequía estacional de 2023 fue particularmente prolongada, exacerbada por el fenómeno de El Niño, que provocó una disminución gradual del número de tránsitos diarios. En noviembre se registró un mínimo histórico de 22 barcos por día. Sin embargo, la situación no llegó a ser tan crítica como en febrero, cuando sólo se reportaron 8 cruces por día, aunque en el mismo año se observó una cola de 163 embarcaciones, la más larga en la historia del canal.
A partir de septiembre de 2024, el canal comenzó a normalizar el tránsito, con un promedio de 36 barcos por día, lo que se considera ideal para su óptima operación. Este regreso a los niveles normales se debió a las lluvias que elevaron los niveles de los lagos artificiales Gatún y Alhajuela, cruciales para el abastecimiento de agua del canal y para más de la mitad de la población de Panamá.
A pesar de los desafíos causados por la sequía, las cifras reflejan una perspectiva positiva. Los responsables del canal reconocieron que 2024 fue un año difícil, pero la caída esperada en los ingresos de hasta 800 millones de dólares no se materializó. Sin embargo, el número de tránsitos y el número de toneladas cruzadas mostraron una disminución significativa. En el ejercicio fiscal 2024 se registraron 11.240 embarcaciones, un 9,20% menos que el año anterior, cuando pasaron por 14.080 embarcaciones. También disminuyeron las toneladas transportadas, con 423,1 millones de toneladas, lo que supone un descenso del 13,10% respecto a los 511,1 millones de toneladas del año pasado.
Se introdujeron diversas medidas para mitigar los efectos de la sequía y asegurar el funcionamiento del canal, como recargos por uso de agua dulce y un nuevo sistema de reserva y subasta para el tránsito de embarcaciones.
Las expectativas para el futuro son más optimistas. Se espera un crecimiento de ingresos de 1.800 millones de dólares en cinco años, lo que refleja la resistencia del canal a situaciones adversas como pandemias y eventos climáticos. Vásquez dijo que se espera que 2025 sea un año “más normal”, con 12.582 tránsitos de gran calado y alrededor de 520 millones de toneladas movidas, lo que resultará en $5.624 millones en ingresos operativos.
Con estas expectativas, el Canal de Panamá está posicionado para enfrentar los desafíos venideros, asegurando su relevancia y efectividad en el comercio global.