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Al menos 114 personas han muerto y otras más de 200 han resultado heridas por un incendio esta madrugada en la sala donde se festejaba una boda en la provincia de Nínive, en el norte de Irak, según fuentes oficiales aunque la Media Luna roja de ese país eleva la cifra de fallecidos a 450 personas.
“El número de muertos es de 114 y hay más de 200 heridos”, dijo en declaraciones a la prensa el gobernador de Nínive, Najm al Yubori. Según las investigaciones preliminares de la Defensa Civil, el suceso podría haber sido provocado por el uso de fuegos artificiales en el interior de la sala donde se celebraba la boda.
El primer ministro del país, Mohamed Shia al Sudani, ha ordenado la movilización de todos los recursos para ayudar a los afectados. Por su parte, el Ministerio de Salud iraquí dijo que “la situación está bajo control” y que está empleando “todas sus capacidades” para atender a los heridos, que están siendo atendidos en varios hospitales tanto en Nínive como del Kurdistán, según el gobernador Al Jubouri.
Además, ha asegurado que “no hay una estadística definitiva para el número de muertos o heridos” y, después de una llamada telefónica con el primer ministro Al Sudani, las autoridades han manifestado que “se están llevando a cabo todos los esfuerzos para ayudar a los afectados de un desafortunado accidente”.
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